lunes, 20 de junio de 2011

El cura concejal de Orense

Por un lado bien y por otro mal
Francisco José Fernández de la Cigoña
Si, como se anuncia, el cura orensano suspendido en sus funciones por tomar posesión como concejal renuncia a la política municipal para volver al ejercicio sacerdotal estaríamos ante una buena noticia. Lo es que prefiera el sacerdocio a la política. Pero... Y hay muchos peros. El cura en cuestión sabía, y si no lo sabía es que su nivel cultural apenas linda la normalidad, que no le iban a permitir ser concejal y sacerdote. Pese a ello se embarcó en la contienda electoral y nada menos que en la lista del PSOE. Partido que, bajo el mando de Zapatero, se ha mostrado abiertamente antieclesial. Además de ruinoso. Pues que persona con esas tragaderas vuelva al sacerdocio es bastante preocupante. Ya sabemos que en el cielo hay mucha más fiesta por un pecador que se convierte que por cien justos que no necesitan penitencia. Y es muy lógico. Pero para ello hace falta un arrepentido. Y lo que sería penoso es que lo que hubiera primado, que no lo sé, es el interés económico. Todos sabemos lo escaso que es el sueldo de un párroco rural pero si la concejalía no estuviera remunerada más vale poco que nada. 

1 comentario:

  1. A contraposición de ideas permite ver un mesmo fenómeno dende distintas ópticas, o que sempre vai en favor da obxectividade. Por iso envío este comentario qu publiquei hai días no blog dun amigo. Pedro J.

    DEREITAS E ESQUERDAS:

    Entereime pola prensa que un cura da provincia de Ourense tivera que renunciar á súa acta de alcalde porque o bispado lle puxera no dilema de ser cura ou ser político.
    Obvio o partido político polo que se presentou este cura, pois creo que escribiría o mesmo fose o partido que fose.
    Unha cousa teño crara: A xerarquía á que coma católico debo obedecer debe aterse sempre ao que Xesús explicitou de forma crara e rotunda: “Ao César o que é do César e a Deus o que é de Deus”.
    Pero se nunha parroquia un cura incumpre este principio e dende o púlpito aconsella, case que impón, votar a un partido determinado, por que esa mesma xerarquía non adopta a mesma medida?
    A coherencia non é a virtude que por desgraza ten adornado á Igraxa española.
    Na mi ña humilde opinión, non se debe adscribir a relixión a ningunha tendencia política. Xa se fixo no pasado e o resultado foi o que foi.

    ResponderEliminar

No lo pienses más, dilo...